13/3/22

No Estaba Muerto...

Queridos hermanos, he obrado el milagro de la resurrección.

No me lo puede creer ni yo mismo, para que nos vamos a engañar, que tras tantos y tantos años, tras muchas lineas escondidas, tras tantas batallas luchadas, que las ha habido vencidas y perdidas, como las ha habido creíbles e increíbles, pero como siempre, y que ganas tenías de escribir esto: todas han sido cómico ético filosóficas... o era etílico?.

De vez en cuando, a lo largo de este tiempo perdido y ganado al mismo tiempo, he ido mirando mi propio blog, miradas perdidas en el vacío, en busca de nada y encontrando de todo. Recordando quien he sido y lo que he pasado, eso que de tanto he hablado de que el camino que he recorrido y los fallos que han conformado mi vida son los que me han llevado hasta donde estoy, como estoy, quien forma parte de mi vida y tantas otras cosas que quizás merezcan la pena ser enumeradas, pero que por motivos de guion no lo serán, quizás en el montaje del director.

 Y creáoslo, o no, que no os voy yo a juzgar por ello, ha pasado otro año desde que escribí estos dos párrafos anteriores y ahora que los continuo, y no por nada en particular, más bien el curso normal de los acontecimientos, eso que ocurre como yo he dicho más de una vez "entre que buscamos nuestros sueños y nos damos por vencidos", eso que se llama vida. Y os preguntareis ¿Que le habrá pasado ala tarambana este para que empezara escribir hace 1 año, se olvidara, y haya vuelto ahora?, pues no me ha pasado nada; bueno, realmente nada no, en este año me ha podido pasar de todo, pero nada interesante o merecedor de ser contado aquí tras tanto tiempo. Simplemente "He mirado".

¿Que he mirado? lo de siempre, que la vida sigue su curso, aunque yo no me he parado está vez a un lado del camino a lamentarme por ser yo mismo y por que me guste serlo. Pero eso no ha hecho que la vida siga su curso, que la estaciones se sucedan unas tras otras, que las agujas de ese viejo reloj sigan haciendo tic antes que tac, que se me siga cayendo el pelo (el poco que ya me queda), que se me acabe el cigarrillo mientras escribo una vez más, que me sigan dando las tantas de la mañana aquí sentado (ahora solo los fines de semana, lo prometo), y un largo etcétera de eventos en sucesión que todos conocemos.

Y he mirado y he visto cosas normales, lógicas, que siempre tienen que pasar, por que pasan, más tarde o más pronto, pero obviamente tenían que pasar.... y no se como me siento al respecto. Feliz, supongo, o triste también. No, definitivamente triste no me siento, hay más cosas hoy en día por las que sentirse triste que sentirse alegre, y ahora que puedo elegir estás cosas, no quiero sentirme triste por ellas. Tampoco decepcionado diría, como he dicho las cosas lógicas han de pasar, como cada día anochece para luego amanecer, como tener que pagar después de tomarse una copa de un trago, o salir corriendo ante el peligro, todo ha de pasar.

¿Sabéis eso que alguna vez he dicho de que no creo en el destino? ¿O era lo contrario? En cualquier caso, lo único que vengo a decir con esto es que yo también me equivoco, y no es una novedad, no obviemos pues que el nacimiento de este rincón perdido de la red viene desde una equivocación juvenil de un servidor. Pero el caso es que aun habiéndome equivocado, estoy... ¿Contento? otra vez no lo se, es un sentimiento raro, y aunque ya peino más arrugas que pelos, muchas más que la última vez que me aventure en una de estás aventuras literarias de las que nadie sabe sobre lo que hablo y yo me alegro por ello, sigo siendo un gran desconocedor de los sentimientos tal vez, incluso de los mis propios.

He tenido un enorme lapso, una conversación interna en la que he discutido con mi yo de hace 18 años, ese al que vosotros, rostros enmascarados que deambuláis flotando por entre estás lineas, vosotros que no existís, para que engañarnos, sobre si quizás era buena idea simplemente poner aquí por lo que estoy escribiendo, sin rimbombantes palabras inexplicables e inentendibles, términos vulgares edulcorados con palabras inquietamente complejas, hablar claro, con pelos y señales.... puede que sea el momento, ya lo hice en anteriores ocasiones, y quizás sea buena idea, vamos a ello, lo mismo me libera un poco y me aclara a mi mismo como me siento.

El que he considerado durante más años de los que quiero admitir, y más aún de los que puedo recordar, el amor de mi vida, la persona con la que creía que acabaría mi andadura en este mundo, se ha casado. Si, oh, vaya tontería.... hace por lo menos 5 años que no hablamos para nada, antes al menos le felicitaba por su cumpleaños por que es una fecha que siempre recordare de una manera u otra, y más aún durante todo este tiempo que os digo que es bastante avergonzante admitir, solo la he visto en persona durante apenas 3 días y 10 segundos una noche... y aún así quiero que sepáis que desde los 18 años hasta este día de hoy, sigue teniendo un lugar especial en mi corazón y dudo que algún día deje de tenerlo.

Se ha casado por que como he dicho antes, es lo normal, es la vida, la gente sigue su camino, yo he seguido el mío, y ella siguió el suyo mucho tiempo ha... pero yo nunca la he olvidado, os aseguro que no. No me preguntéis porque, no sabría explicarlo realmente, pero es así, desde que la conocí es una persona que me ha tenido hechizado, y no es que no haya habido nadie más en mi vida durante todos estos años, vamos sin ir más lejos ahora mismo estoy muy feliz con la persona con la que comparto mi vida, pero aún así...

No es como era antes, ni mucho menos, aquello de que "no pasa un día sin que piense en ella" dejo de ser verdad hace bastante, pero igualmente, no se me puede olvidar decir que cada vez que me acuerdo de ella, me sorprendo a mi misma con la misma estúpida sonrisa que aquella noche que me cruce cara a cara con ella por primera vez.... nunca olvidare ese momento, esa aventura memorable con triste final (como era común por aquel entonces),

Si, aún en la lejanía, sin hablar con ella, sin verla, sabiendo que es feliz sin mi, dudando que se acuerde si fuera de mi como yo de ella... aún así sigo siendo muy feliz cada vez que su imagen se posa en mi  mente que fuera o fuese por un misero segundo. Por que no puedo olvidar tantas cosas, por que aunque yo quizás no fuera la persona idónea para ella, y juro que lo intente, por que quizás esa historia que yo tenía montada en mi cabeza fuera más fantasía de dragones y castillos que verdad, por que a lo mejor ella nunca me viera a mi como yo la vi ella.... quien sabe, demasiados quizás, no me gustan los quizás... a lo mejor antes me gustaban, pero os aseguro que ya no.

Creo sinceramente que a lo mejor yo no fui justo con ella, ella no lo fue conmigo, y a bien seguro la vida no lo fue con los dos, yo lo intente hasta la última gota de mi ser creo, pero sigo siendo Elio, el sujeto 0.173, y al igual que a veces tengo la boca muy grande y el corazón igual, otras soy un cobarde... si, yo salí corriendo de esa historia muchas veces, lo admito, asustado, cansado, incluso enfadado.... pero ella siempre me dejo volver hasta que ya no pudo ser más, creo que los dos nos cansamos de intentarlo, nos cansamos de vivir la vida en diferido, o de engañarnos a nosotros mismos, no puedo hablar por ella, seguro que tenía sus motivos y se merecía ser feliz, al igual que ahora me doy cuenta de que yo también me lo merecia y hacía bastante poco por ello, siempre estaba esperando algo... 

Bueno, creo que ya está bien de recordar. Después de tantos años y tantos años en el auto exilio de la escritura, está más que bien por una noche.

Bella dama, si por un casual remoto y más que improbable usted lee esto en algún momento de su vida, quiero que sepa que me alegro mucho por usted, que ojala sea muy feliz, que todo le vaya estupendo, que sea muy dichosa en su relación, y que si en algún momento descubro que su marido no esta a altura que usted se merece, pongo al Rey de Singapur por testigo que sabrá del Sobrino de Joaquín por las malas.

¿Yo solía despedirme con una cita inventada de lo más rara verdad? Pues... te apulaño.

Firmado - Elio, el exiliado literario.